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Mostrando entradas de enero, 2017

Sigo siendo el niño.

Sí, lo intento negar a veces, cuando veo que el futuro que me acecha sigue siendo tan oscuro como la economía de este país y pienso que hay millones de cosas más importantes en las que pensar cuando miro mi cuenta corriente y la pasividad que existe en las venas de mis paisanos. Lo oculto, lo maquillo, y me equivoco. Sigo siendo el mismo. A escondidas, en la cama, me vienen los recuerdos de mi infancia, de cómo me aprendí la presentación de Entre Rejas, o cómo cantaba A fuego Vivo con mi hermano. De cómo en el patio del colegio era capaz de interpretar entero el popurrí de Terror Terrorífico, y de lo que envidiaba a esos niños de la peña Nuestra Andalucía que hacían sus comparsas infantiles y juveniles.  Intento evitar el acordarme de lo feliz que era cuando mi hermano me llevaba al gallinero del Teatro Falla, de esa sesión de tarde de las Viudas, o cómo iba por la calle como un loco detrás de las agrupaciones para comprar libretos. Intento no acordarme de la Galerada al lado de m

La pérdida.

Hace mucho tiempo que el daño al que me sometía la vida diaria hizo que dejara de creer en la figura de un Dios por el que me sentía abandonado. Mucho tiempo que el amigo que esperaba encontrar en las alturas fue sustituido por mi creencia en el hombre. Sí, ese hombre que estudiaba durante la carrera, del que realmente me fijaba en sus cosas positivas, el hombre que hizo el fuego, que levantó la Gran Pirámide, que escribía en el s.V. a.C. en la Grecia clásica ideas que forman la base de nuestra moral y nuestra cultura. Esa democracia ateniense, esos hombres que pensaban cómo mejorar las formas de convivir en una ciudad durante el Imperio Romano, el de las alcantarillas, el de los acueductos, el hombre que fue silenciado por Dios durante la Edad Media pero que volvió para traernos la obra de Miguel Ángel, los inventos de Leonardo, las ideas de Voltaire,Montesquieu y Rousseau. Un hombre Dios, un hombre ideal e imaginario.  Durante ese tiempo miraba a mi madre, fervorosa creyente, y